Blabjorg Resort, Borgarfjörður Eystri

Este lugar es un auténtico hallazgo, aunque llegar no fue fácil, valió la pena cada kilómetro. Nos alojamos en un apartamento de tres habitaciones que superó nuestras expectativas. El desayuno fue maravilloso y el personal fue encantador. Sin embargo, podría mejorar un poco la distribución de los baños compartidos y la entrada a través de la cocina, que causó algo de confusión.

Este hotel fue una experiencia maravillosa. La ubicación, aunque un poco complicada debido a la montaña, valió totalmente la pena por las opciones de spa y la limpieza del lugar. Las instalaciones son excelentes, aunque la cocina compartida puede hacer que los olores se extiendan un poco por el pasillo. En general, es un lugar cómodo y limpio con desayuno incluido, pero las comidas podrían ser un poco limitadas.

La estancia fue maravillosa en este alojamiento. Las habitaciones eran amplias y cómodas, y la experiencia en el spa fue verdaderamente relajante, especialmente el jacuzzi al aire libre. Sin embargo, compartir el baño con otros huéspedes puede ser un poco complicado por las mañanas. La ubicación era perfecta para disfrutar de las Auroras Boreales desde el muelle cerca del hotel.

Definitivamente, Blabjorg Resort fue una experiencia inolvidable. La llegada fue cálida y acogedora, y me impresionó la limpieza y comodidad de la habitación. A pesar del mal tiempo, disfruté de las instalaciones, especialmente del bar y el restaurante en el lugar. El desayuno fue, sin duda, el mejor que he probado en mis viajes, aunque me habría encantado un poco más de variedad en las opciones. En general, un gran lugar para disfrutar de la naturaleza y unas vistas espectaculares.

Tuve una experiencia maravillosa en este lugar después de un largo día de senderismo. Los jacuzzis son una excelente manera de relajarse y el desayuno fue delicioso y variado. Aunque el restaurante puede ser un poco caro, la comida es espectacular. Las habitaciones son sencillas pero impecables y ofrecen una vista hermosa del puerto. Sin duda, es un lugar al que quiero regresar en mi próximo viaje a Islandia.